Si la cagas, cágala bien, no la cagues a medias.
Esta frase tal vez ya la habías escuchado en alguna ocasión, pero llego a mi mente, ya que por error había olvidado el cargador de mi computadora, podrán imaginarse el caos y la frustración que sentí en un principio, sobre todo por que era uno de esos días en los que tenía mil pendientes que resolver y obligadamente tendría que tomar unas vacaciones de por lo menos 15 horas.
¡La cague! Fue mi expresión al darme cuenta que no traía mi cargador, minutos después pensé, creo que la cague y bien, por qué después de tener más de una semana durmiendo 3 horas por día, era justo y necesario tener un descanso.
Derivado de toda esa telenovela que arme en mi cabeza, me gustaría invitarlos a cagarla, pero bien, no a medias. Las cosas a medias tintas no sirven, si vamos hacer algo, hagámoslo con la confianza y seguridad de que por lo menos si algo sale mal, no sea por nuestra falta de actitud, esto aplica para cualquier cosa que hagas en la vida, algo tan normal como darle un abrazo a tu hijo, no lo abraces a medias, abrázalo con fuerza, que sienta el amor que le tienes, demuéstrale a tu novia, esposa, amiga o compañera de vida cuanto la amas, pero que te nazca del fondo no lo hagas a medias, disfruta la vida con gratitud y no esperando tener todo lo que no sabes si llegarás a disfrutar, y si al final las cosas no son como tú lo esperabas, no lo tomes personal, si tu hijo rechazó el abrazo, si el te amo no te fue valorado, si la vida no te brindó lo que esperabas, siéntete pleno de haber dado lo mejor de ti y cuando alguien te juzgue por tus errores, sepa que tú la cagas, pero bien, no a medias.
¡Recuerda!, en la vida hay que dejar huella y esa solo con la actitud queda marcada.
A dejar huella Alberto!!
Muy buena reflexión tienen razón todo hay que hacerlo con la mejor actitud posible saludos